Acero galvanizado y otros aceros que no se oxidan para el brezo

En el proceso de elaboración de un rollo de brezo natural para vallados de jardín y terraza es fundamental el cosido, un entramado que se logra gracias al acero galvanizado. En Brezonatural.com nos decantamos por este material por simple sentido común, pues no se oxida ni deteriora con el tiempo, motivo por el cual no afecta a la materia prima, es decir, al propio brezo. Sin embargo, no se trata del único metal con unas propiedades envidiables, sino que el mercado ofrece otras opciones. Conócelas.

 

Acero inoxidable: es la denominación general que sirve para referirse a cualquier clase de acero aleado (con aleación) que contenga un mínimo de un 10,5% de cromo y no mas de 1.20% de carbono. La mayoría de ellos poseen níquel, cromo y otros compuestos que les brindan ese aspecto brillante y que los hace resistentes a la corrosión y al efecto de la humedad, los ácidos y gases. Digamos que el acero galvanizado de nuestros rollos y grapas va un poco más allá, pues también puede con la abrasión.

 

Acero Corten: se trata de un acero común a base de níquel, cromo, cobre y fósforo, que no se ve afectado por la corrosión, pues ha sido sometido a un proceso de humectación y secado alternativos. Se usa en la industria cementera y en la construcción en general. Está presente en puentes, estructuras, fachadas, puertas metálicas, etcétera.

 

Acero Calmado: es aquel que se ha sometido a una fase de desoxidación mediante la adición de metales y un proceso de colado. El resultado es un tipo de acero que no produce gases cuando se solidifica. Su aspecto es rugoso y se emplea en estructuras de hormigón, ya que se adhiere muy bien.

 

Acero Aleado: se le han agregado ciertos elementos que mejoran sus propiedades. Estos suelen ser carbono, cromo, molibdeno o níquel.