Una de las grandes virtudes de nuestros productos estrella (el mimbre, el brezo y la corteza de pino a doble cara para cerramientos de jardín y terraza) es que se trata de materiales de procedencia natural. Así, el primero se extrae de la Serranía de Cuenca, el segundo de los arbustos del Baix Empordà y, para conseguir el tercero, se “rascan” los pinos autóctonos de nuestra comarca. Es por eso, por lo que el resultado que se logra con este tipo de vallado queda totalmente integrado con el paisaje y le da un toque rústico al conjunto pues, en la antigüedad, estos materiales eran los que se usaban en la construcción de las casas etcétera.
Precisamente por esta cuestión, las cubiertas de mimbre y brezo, se emplean en la actualidad en varios parques temáticos para recrear determinados ambientes y emplazamientos. Sucede esto en la Ciudad Medieval del parque francés Puy Du Fou, una “urbe” en la que destacan los techos inclinados de brezo y caña, en forma de manto, las escobas tradicionales de brezo, las ventanas de madera, etcétera.