El cosido de la escoba de brezo

Como sabes, las escobas de brezo son otras de las grandes protagonistas de Brezonatural.com. Las puedes colgar en la pared a modo decorativo para darle un toque rústico a tus estancias o bien, utilizar como desde hace siglos se hace: para barrer. Sí, porque las escobas de brezo llevan a sus espaldas una gran tradición.

De hecho, el proceso de elaboración de una escoba de brezo es muy parecido al que se llevaba a cabo en sus orígenes. Hoy te contamos la parte del cosido.

 

La idea principal es que el material, el brezo, quede bien sujeto y que las cerdas se incrusten bien a la manija. Para lograrlo, deberás atar y aplastar el brezo con fuerza.  Usa una abrazadera, te facilitará la tarea.

No basta con hacer un nudo convencional, sino que deberás doblar el cordel (que quede doble, más resistente) y realizar un nudo corredizo. Pásalo por debajo de la escoba.

Para coserlo deberás decantarte por una aguja resistente, que te permita envolver y pasar por las cedras sin problemas pero también que sea fácil de enhebrar. El proceso de cosido es sencillo: empieza con un grupo pequeño de cerdas y ve hacia abajo, donde engancharás el hilo para, de nuevo, volver arriba y empezar de nuevo. Trata de hacer filas y que su punto de partida sea distinto, algo que le brindará más estabilidad.

 

Ten en cuenta que este es uno de los procedimientos más complicados para fabricar una escoba de brezo y que existen otras modalidades más sencillas.