El glamping, una apuesta por el brezo y otras fibras naturales

El término glamping es una combinación de las palabras glamour y camping, y sirve para denominar, precisamente, a un tipo de camping más sofisticado e integrado en la naturaleza. Este tipo de complejos vacacionales pretenden acabar con el concepto casposo de acampada en recintos de escaso atractivo donde las familias se amontonan en un reducido espacio. No, el glamping va mucho más allá y, de hecho, no solo trata de crear un entorno agradable en plena naturaleza para que el visitante se sienta a gusto, sino que para lograrlo se vale de materiales ecológicos. Y es ahí donde tiene cabida el brezo, el mimbre, la corteza de pino y otras de las soluciones que te brindamos en Brezonatural.com.

 

Uno de los alojamientos españoles que se decanta por el glamping es El Tajo del Águila, en Cádiz, un complejo de la empresa Hoteles Andaluces con Encanto (HACE) que ha apostado, precisamente, por esto: el encanto. Sí, porque esta evolución del cámping tradicional no solo aporta glamour a la escapada sino también comodidad.

 

El proyecto, en plena creación y enmarcado en el turismo rural, incluirá alojamientos respetuosos con el ecosistema y el medioambiente, una cuestión fundamental ya que la zona se encuentra protegida por su gran variedad de fauna y flora y, en definitiva, recursos naturales que cabe preservar. Estos alojamientos son conocidos también como ecolodges.

 

Al margen de nuestro país, las estancias de esta clase se incrementaron hasta un 18'5% el año pasado, y según los expertos es un mercado que, a finales de este año, habrá aumentado un 29%.