Cómo reparar una valla de madera que sustenta el brezo

Cómo reparar una valla de madera que sustenta el brezo

Una de las virtudes que tienen nuestros vallados en general, sobre todo aquellos elaborados con brezo, mimbre y corteza de pino a doble cara (no se trata de un único sistema de ocultación, sino de tres distintos) es que su durabilidad y resistencia. Es decir, son cerramientos fuertes, ideados para soportar duras condiciones meteorológicas y variadas inclemencias climáticas en perfecto estado. Además, no requieren de ningún tipo de mantenimiento, al margen de alguna rociada con la manguera para hidratarlos y quitarles el polvo.

 

No sucede lo mismo, sin embargo, con los cercados que los sustentan, que frecuentemente deben ser cambiados antes que el propio rollo de brezo. En el caso de los soportes de madera, especialmente, es una cuestión bastante común. Pero no te preocupes, en la mayoría de los casos tiene solución: basta con aflojar las bridas del brezo y desmontarlo para reparar el cercado que lo aguanta.

 

Lo habitual es que la madera se haya astillado o podrido. El segundo de los casos es más grave y requerirá de una renovación completa, pero el primero todavía puede aprovecharse.

 

En primer lugar limpia la cerca con agua a presión para eliminar el moho y las decoloraciones. Repara los postes astillados y cambia aquellos tornillos que ya estén oxidados. Barnízala o píntala para aportarle una capa extra de protección. Una vez seco (tardará varios días) vuelve a colocar encima el rollo de brezo.