El mimbre y los animales domésticos

Uno de los productos más demandados por los clientes de Brezonatural (junto con los rollos de bruc), son los vallados de mimbre para cubrir vallas en jardines y terrazas y crear un entorno único y protegido de las miradas ajenas más curiosas. Sin embargo, son muchos los propietarios que, precisamente porque disponen de un espacio exterior bastante grande,  han adoptado a una mascota en el seno de su familia. Descubre cómo interaccionan estas mascotas con el cercado pero también con otros muebles y objetos de mimbre en general. Nos centraremos en perros y gatos.

 

De esta manera, los perros no suelen tocar ni muebles, ni cestas ni tampoco el cerramiento. De hecho, pueden tener hasta su propia camita elaborada a base de esta fibra. Respecto al vallado en concreto y puesto que resulta lo suficientemente espeso para que el animal no pueda ver a través de él, te evitará ladridos molestos cuando la gente pase por al lado (y la parte exterior).

 

Con los gatos no sucede lo mismo: adoran afilarse las uñas en sillas, pufs, cestas para la ropa y toda clase de accesorios de mimbre. Ahora bien, por el vallado les resulta complicado trotar porque tiene un acabado estupendo. Además y como no tiene agujeros, no son capaces de escaparse ni romperlo.