La flora del entorno del mimbre: el rebollón

El mimbre que usamos para elaborar nuestros cerramientos de mimbre naturales para vallados de terraza y jardín procede de la Serranía de Cuenca, un ecosistema rico por su fauna y flora en el que nuestra fibra favorita convive con otras especies vegetales (y alimentarias) como el rebollón.

 

Su nombre científico le precede: lactarius deliciosus. Y verdaderamente tiene un sabor de lo más rico. También es conocido como níscalo y mízcalo y, además de en el entorno del mimbre, lo encontramos en casi cualquier bosque o pinar mixto de España, el ámbito en el que suele desarrollarse.

 

Respecto a su aspecto, cuenta con un pie bastante corto y cilíndrico, de estructura granulosa y bastante resistente. El sombrero está doblado hacia abajo y, si se gira, se observará que la piel tienen como una especie de estrías, aunque la parte superior sea perfectamente lisa. El color varía enormemente de la zona y de unas a otras, pero lo habitual es que estas setas tan apetecibles sean rosadas y moteadas.

 

Se suele consumir asada, en compañía de un sofrito de ajos o cebolla y es un manjar realmente apreciado por la mayoría de paladares, a pesar de su intenso gusto. Y tú, ¿has probado esta delicia del entorno del mimbre?